¿Cuántas historias quedan sin contar todos los días en Netflix?

Tras la presentación de su colección Black Lives Matter en el servicio de transmisión, Shadow And Act se enteró exclusivamente de que Netflix está comprometiendo $5 millones para causas que apoyan a la comunidad negra.
0
280

Con una pluralidad de voces, rostros y acentos, nos hemos abierto camino hacia una nueva forma de concebir la industria del cine y la TV afrobrasileña. Somos la primera o, quizás, la segunda generación de creadores negros brasileños con la oportunidad de derribar los muros que nos separan de una narrativa verdaderamente pluralista. Palabras como «diversidad» y «representación» ya no bastan para abarcar la multiplicidad de la identidad negra. Nuestras historias son apremiantes, ya que cada vez más personas quieren verse reflejadas en la pantalla.

Como creador negro y amazónico, reconozco esta responsabilidad de no solo consumir sino también producir conocimiento, en forma de arte. Al fortalecer las narrativas negras, pasamos de ser solo personajes marcados por estereotipos a ser los protagonistas de nuestras propias historias. El cine afro no es ni debería ser tratado como un género: es una revolución.

Internet ha reforzado esta conexión entre los profesionales negros y ha demostrado ser una nueva ventana para nuestras narrativas. En la práctica, sin embargo, nos enfrentamos a disparidades debido a la discriminación racial que aún persiste. Existe una brecha en el desarrollo profesional, especialmente en la tríada creativa —guionistas, producción y dirección afro—, y carecemos de recursos para poder crear.

En el norte, por ejemplo, tan solo contamos con un programa universitario federal relacionado con el cine. Amazonas es uno de los tres primeros estados en Brasil con mayor demanda para locaciones de rodaje, después de Río de Janeiro y São Paulo. Pero pocas producciones se originan allí. Entonces, me pregunto: «¿Cuántas historias quedan sin contar todos los días?»

La situación que estamos viviendo actualmente con la pandemia es muy dura. Y en tiempos como estos, los profesionales negros hacemos lo que siempre hemos hecho: nos reinventamos. Los fondos como FAPAN, que respaldados por donaciones como la de Netflix, anunciada el día de hoy, son importantes para transformar vidas, al estimular a los profesionales independientes y a los productores negros. Esos productores encabezan lo que llamamos empresas vocacionales, que se dedican a la producción de contenido identitario. Son personas que entienden la necesidad de una transformación en la cadena de producción, que comienza con la creación de nuestras narrativas. De esa manera, estas historias se muestran en las pantallas más diversas, para que puedan difundirse y llegar a más público.

Cuando se encienden las luces del cine o cuando terminamos un maratón de una serie, ¿qué es lo que se queda resonando y se concreta en acciones? Esa es la razón de existir de estas productoras independientes, y necesitamos que sigan existiendo.

Con información del Comunicado de Prensa.

Foto del avatar

Comments are closed.