El asombroso entrenamiento de Gerard Butler para la película 300

La vocalización, la expresión corporal y la capacidad para improvisar fácilmente son algunos de los atributos que necesita un actor para destacarse en el mundo artístico. Un buen profesional de la actuación hará hasta lo imposible por interpretar a su personaje de manera creíble y natural. Por ejemplo, si la historia narra la biografía de un cantante, el actor tendrá que desarrollar competencias como el canto o el baile antes de comenzar el rodaje.

Y, ¿Qué pasa con el aspecto físico? Todos los actores utilizan maquillaje y hasta prótesis para retratar al personaje lo más realista posible. Sin embargo, en ocasiones los actores necesitan hacer cambios drásticos en sus cuerpos. Por lo tanto, se someten a dietas estrictas y entrenamientos rigurosos para asemejarse al protagonista.

En este caso, Gerard James Butler, actor británico que interpretó al rey Leónidas de Esparta en la película 300, se sometió a cambios drásticos en su vida durante cuatro meses, concretamente en aspectos como su dieta y entrenamiento físico.

Durante el 2007, Gerard Butler parar interpretar al personaje en 300 se sometió a un fuerte entrenamiento físico durante seis horas diarias con Mark Twight, un reconocido entrenador personal de luchadores de MMA (Mixed Martial Arts), jugadores de la NFL (National Football League), ciclistas y hasta militares. Además, es un amante de los deportes extremos y escalador profesional.

“Me interesa trabajar con gente que quiere poner a prueba sus límites porque les sometemos a mucha presión desde el punto de vista muscular y metabólico. Y puedo decir que les he visto llorar y vomitar”, mencionó Mark Twight.

Para conseguir un cuerpo perfectamente musculado realizó 25 repeticiones de dominadas, 50 repeticiones de peso muerto, 50 flexiones, 50 saltos en caja, 50 floor wipes, 50 power cleans y 25 repeticiones de dominadas (más).

Según Alberto Morillo, entrenador personal y colaborador de la plataforma Fitnesspiratas, este tipo de entrenamiento tiene un enfoque muy cercano al CrossFit, que desarrolla ejercicios funcionales y de fuerza en alta intensidad para aumentar la resistencia, fortalecer la musculatura y conseguir un cuerpo más estilizado. Los floor wipes, por ejemplo, trabajan los músculos abdominales superiores e inferiores, así como los músculos flexores de la cadera (psoas, ilíaco, recto femoral del cuádriceps y el sartorio).

Gerard Butler tenía que comer lo suficiente para desarrollar músculo, mantener constantes los niveles de energía y contribuir a quemar grasa corporal.

En ese contexto, consumía cantidades descomunales de proteína (pollo, pescado, huevo, batidos de proteína). Hidratos de carbono complejos antes del entrenamiento (harinas integrales, legumbres, patatas, frutos secos, algas y líquenes). Limitar los carbohidratos por las tardes y noches, consumir muchas frutas y vegetales y mantenerse bien hidratado. Después de sus rutinas de entrenamiento, debía comer entre 5 y 8 comidas al día, repartidas cada 2 o 3 horas.